Los datos de REE. INE y AEE no dejan lugar a dudas en cuanto a la tremenda explotación eólica del territorio gallego. Las tablas estadísticas resultantes de la tasa producción eléctrica eólica por kilómetro cuadrado son indiscutibles y exigen una profunda reflexión en cuanto al futuro de la energía eólica en Galicia.

Según los datos del Anuario 2023 de la AEE, ocho comunidades autónomas no instalaron el pasado añ0 2022 ni un solo nuevo megawatio eólico, y una de ellas, Galicia, solo lo hizo con 0,1 MW (datos AEE). A pesar de ello, el liderazgo gallego en cuanto a ocupación del territorio es imbatible. Galicia genera un 138% de toda la energía que consume y el excedente sale de la Comunidad. Lugo sigue siendo líder nacional, con una tasa de 0,471, lo que debe ser suficiente para promover una profunda reflexión acerca de la invasión eólica de Galicia.

Por todo ello, ARCO IRIS respalda las movilizaciones sociales contra la Ley de acompañamientos de Galicia, que trata de insuflar más aire a una burbuja eólica ya inasumible, que está causando daños ambientales y paisajísticos ya irreversibles en muchas zonas de la Comunidad. El camino a seguir no es seguir sacrificando a un territorio ya martirizado en exceso, sino asumir los argumentos más que razonables de infinidad de colectivos sociales, hartos ya de la impunidad del holding eólico, a las que se adjudican recursos públicos para especular con ellos y venderlos al mejor postor, sobre todo a empresas extranjeras (muchas de ellas públicas) que cotizan lejos de nuestras fronteras sin importarles hipotecar la soberanía energética y el potencial ambiental y turístico de nuestro país.