Ya sea porque te has decidido a hacer una reforma o porque el grifo que tenías instalado anteriormente ya ha pasado su tiempo de vida útil, es conveniente tener a mano toda la información para saber decidirse a la hora de comprar el mejor grifo de baño.
Lo principal en este asunto es elegir un modelo que ofrezca una buena resistencia. Aunque tampoco se pueden descartar aspectos como la combinación con la decoración del espacio, o la facilidad de limpieza que puedan tener. Asimismo, se deben revisar aspectos como el precio y el tipo de instalación que necesitan.
Es común pasar horas revisando los modelos que ofrecen en las tiendas físicas u online sin entender mucho las necesidades que podemos tener. En este caso, se pueden seguir dos opciones: consultar con un profesional o, si no se tiene acceso en un momento determinado, seguir los consejos presentados en artículos como este.
En el primer caso está bastante claro. Si necesitas escoger una buena cerradura para la puerta principal de tu casa, lo mejor será estudiar la opinión de un profesional de esta área, como el cerrajero 24h Pinto. Para el segundo método el asunto se vuelve un poco más sencillo, ya que estos artículos quedan disponibles en Internet para consultarlos cuantas veces necesites. Incluso que formen parte de una biblioteca digital.
El objetivo del grifo
En el baño podemos encontrar dos zonas principales donde podría hacer falta colocar o sustituir un grifo: el lavabo y la bañera. En algunos casos puede ser necesario uno también para el bidé, si está disponible.
Para el lavabo y el bidé, el grifo suele tener un brazo más largo y ajustado. Este deberá tener la longitud necesaria para asegurar que toda el agua caerá en el vano y reducir las posibles salpicaduras. Si se tienen dudas respecto a este punto, se puede consultar con un fontanero Rivas profesional para determinar el rango de medidas más conveniente.
En el caso de la bañera, los hay de tres tipos: grifos específicos para ella, de ducha o los de tipo mixto. En líneas generales, los que son específicos para bañera tiene una longitud de salida más profunda. Los de ducha son tubos largos que culminan en una especie de regadera. Y los mixtos conectan ambas tecnologías a través de una manguera. Si deseas hacer una instalación de cualquiera de estos tipos, no dudes en buscar la ayuda idónea en https://www.fontanerossansebastiandelosreyes.es/.
Los materiales de fabricación
Por el tipo de trabajo que deben realizar los grifos, estos deben tener una resistencia muy buena. Además, su material debe ser anticorrosivo para soportar la constante presencia de agua.
El sistema de fabricación cromado es el que se utiliza actualmente con más frecuencia. Gracias a que su durabilidad es más amplia que la de otros materiales, sus fabricantes apuestan por una garantía que puede alcanzar, incluso, los 5 años. Dando por sentado que se trata de un producto de calidad.
Otras características que ofrece un grifo cromado es su superficie siempre brillante que le ofrece un toque de lujo a cualquier baño. Se limpian sin mayor inconveniente y son poco propensos a sufrir por los roces.
Sin embargo, también se encuentran en el mercado opciones hechas en cobre, cuyos resultados ofrecen un estilo orientado a la decoración vintage. Para casos más exigentes, se pueden encontrar versiones hechas de una mezcla de materiales metálicos y vidrio.
En todo caso, la mejor elección siempre irá en pro de la calidad y resistencia del producto, pues la idea es hacer una inversión perdurable en el tiempo.
La instalación y el mantenimiento
Asimismo, es indispensable buscar un buen profesional que pueda realizar la instalación adecuadamente, pues irá muy de la mano con el funcionamiento correcto del producto. Por ejemplo, se pueden buscar fontaneros baratos en Getafe que tendrán toda la disposición para hacer un estudio detallado y llevar a cabo el proceso sin percances.
Con respecto al mantenimiento, este se orientará al asunto de la limpieza, pero también al cuidado del aireador. Algunos modelos permiten remover el aireador y hacer una limpieza profunda o su respectiva sustitución cuando ya no es capaz de realizar el trabajo como es de esperarse.