El último informe del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) sobre actitudes hacia el Estado de Bienestar revela una sociedad española desencantada con la justicia y los servicios públicos. Los datos evidencian una percepción generalizada de desigualdad ante la ley y en el acceso a prestaciones esenciales, mostrando fisuras en la confianza ciudadana hacia las instituciones.
Desigualdad ante la Ley y Acceso a Servicios Públicos
Según el estudio, un 71,3% de los encuestados no percibe igualdad ante la ley, y solo un 26% considera que todas las personas reciben el mismo trato. En cuanto al acceso a servicios públicos, el 51,5% opina que existen desigualdades, frente a un 47,8% que considera lo contrario. Los principales factores de esta discriminación percibida son los ingresos económicos (25,5%), la comunidad autónoma de residencia (13,9%), el lugar de vivienda (11,6%), la nacionalidad (10%) y la raza (9,6%).
Servicios Públicos: Desconfianza en la Garantía Universal
Aunque los derechos a la educación pública y la protección de la salud obtienen las mejores valoraciones (ligeramente superiores al 60%), el acceso a una vivienda digna es visto como un privilegio, con apenas un 15,7% de encuestados que lo consideran garantizado para todos. Además, el 58,6% cree que la sociedad se beneficia poco o nada de los impuestos, y un notable 62,1% considera que paga más de lo que recibe a cambio.
Valoración de los Servicios Públicos
Las farmacias son las instituciones mejor valoradas (8,24 sobre 10), mientras que las oficinas bancarias (5,33) y los centros para personas dependientes (5,89) tienen las peores calificaciones. Los ayuntamientos tampoco logran convencer a la ciudadanía, quedando por debajo de servicios como los centros de salud (6,50) o el transporte público (6,57).
Fragmentación Política
En el ámbito político, el informe refleja un panorama electoral fragmentado. Según la intención de voto, el PSOE lidera con un 22,1% de las preferencias, que suben al 26,7% al sumar simpatizantes. El PP se sitúa en segundo lugar con un 16,3% de intención directa y un 18,6% incluyendo simpatías. Más abajo se encuentran VOX (6,8% - 7,6%) y Sumar (4% - 5,4%).
Sorprendentemente, un 11,4% de los encuestados no acudiría a votar si mañana se celebrasen elecciones, mientras que el 66% garantiza su participación, reflejando una sociedad dividida entre la apatía y el compromiso político.
El informe del CIS ofrece una fotografía preocupante: una ciudadanía que percibe desigualdad estructural, que duda de la capacidad de las instituciones para garantizar derechos básicos y que desconfía del uso de los impuestos. Este panorama de insatisfacción, combinado con la fragmentación política, subraya la necesidad de reformas profundas para restaurar la confianza en el sistema.