Consejos para aprender francés viviendo en Francia
Todos sabemos que los franceses están muy orgullosos de su idioma. Cualquiera que haya cometido el error de hablar inglés con un francés te dirá con entusiasmo que aprenda a hablar francés. Si vas a esforzarte por aprender bien francés, ¿por qué no aprender bien el idioma viviendo en Francia?
Para todos aquellos que buscan mejorar su francés, aquí explicamos algunos consejos para poder hablar como un auténtico parisino o, al menos, ser entendido por uno.
Cursos y talleres
La manera más obvia de mejorar tu nivel de francés es a través de una escuela de francés. Esto es especialmente útil si quieres desenvolverte con el francés de forma fluida en cualquier conversación, en el trabajo o en ámbitos más específicos.
Entre los cursos de francés en París para extranjeros más prácticos se encuentran los de la escuela Lutece Langue, destinados tanto a particulares como profesionales. Se imparten en grupos pequeños de entre 2 a 6 alumnos, y van desde el nivel principiante hasta el avanzado. Todos los estudiantes se ubican en una clase según su nivel de expresión escrita, oral y comprensión.
Estos cursos pueden personalizarse con talleres temáticos de francés en París para pequeños grupos. Son cursos opcionales que están destinados a resolver necesidades específicas del idioma. Puedes hacerlos sin asistir a los cursos de francés general o realizar un curso estándar o intensivo y los talleres el mismo tiempo. Así podrás tener una base general del francés y practicar habilidades específicas al mismo tiempo
Intercambios de idiomas
Existen intercambios de idiomas por todo París, generalmente en los bares, donde puedes practicar tu francés con un nativo y hablar en español con otros participantes que quieran aprender el idioma. Estos “intercambios lingüísticos” pueden variar. Algunos son específicamente de inglés-francés en los que los nativos de cualquier idioma se unen para practicar la lengua extranjera en la que les gustaría mejorar. Otros son un free-for-all internacional, donde cualquier persona se presenta para hablar en diferentes idiomas al mismo tiempo.
Televisión y radio
Esta es otra manera de mejorar tu francés. Sumérgete en todo lo relacionado con los medios franceses, desde películas y televisión hasta transmisiones de radio.
En tu viaje en tren a la escuela o al trabajo, puedes escuchar toda la actualidad más reciente mientras aprendes una gran cantidad de vocabulario, desde el más coloquial hasta el más avanzado. Además, puedes enterarte de los eventos programados para hablar con amigos o compañeros de clase.
En la Radio Nacional de Francia no solo podrás escuchar las últimas noticias, sino también entrevistas con personalidades interesantes o críticas sobre arte. La radio es una buena introducción al idioma y un gran comienzo para que tu oído se acostumbre a cómo suena el francés en una conversación normal, especialmente cuando escuchas entrevistas.
Periódicos
En cuanto al material de lectura, hay una gran cantidad de sitios web donde leer en francés. Si usas Twitter, puedes seguir a periódicos franceses como: Le Monde, Le Figaro, Agence France-Presse, Le Parisien, Canard Échainé, Jeune Afrique, etc.
Una buena forma de aprender con periódicos online o en papel es leer un artículo todos los días y detenerte cuando encuentres una palabra que no conoces, para buscarla y poder seguir con la lectura. De esta manera, aprenderás más vocabulario y profundizarás en la gramática, además de estar al tanto de las últimas noticias del país.
Compañero de conversación
Esta forma de aprender francés es para las personas más motivadas y poco tímidas. Es similar a una reunión de intercambio de idiomas, pero mucho más personalizada según tus necesidades lingüísticas. Lo ideal es acceder a redes sociales como Facebook para buscar compañeros de conversación que estén interesados en aprender español y que sean nativos franceses.
En esta red social puedes encontrar fácilmente grupos en los que integrarte comentando cuál es tu idioma nativo a cambio de hablar en francés. La idea es encontrar a una persona cuyo horario y estilo de aprendizaje coincidan con los tuyos. Es recomendable reunirse, al menos, semanalmente con quien hayas encajado.
A veces puede ser un café, otras una cerveza en un bar, pero si realmente quieres ampliar el vocabulario, intenta quedar con esa persona en una ambiente diferente cada vez que os veais. Por ejemplo: puedes visitar un museo que te interese para verte obligado a ampliar el vocabulario cultural y de arte; también puedes dar un paseo por un parque; ir al cine a ver el estreno de una película; o ir a comer a un establecimiento para probar la gastronomía típica de Francia. Las opciones son muy variadas.