Un reciente informe señala al municipio de Boimorto como el único de Galicia afectado por contaminación de agua potable con nitratos.

La fuente principal de esta situación es la elevada cabaña ganadera y el uso excesivo de abonos nitrogenados en los terrenos agrícolas. La reducción de los nitratos a nitritos puede ocasionar metahemoglobinemia principalmente en los lactantes menores de 6 meses. La metahemoglobinemia es la “afección por la que hay una cantidad más alta de lo normal de metahemoglobina en la sangre. La metahemoglobina es una forma de hemoglobina que no puede transportar oxígeno, de manera que no llega suficiente oxígeno a los tejidos. Los síntomas de la metahemoglobinemia incluyen dolor de cabeza, mareo, cansancio, falta de aliento, náuseas, vómitos, latidos cardíacos rápidos, pérdida de coordinación muscular y piel de color azul”. Por otra parte, lo nitritos reaccionan con aminas formando nitrosaminas, de las cuales se sabe, por estudios en animales y algunos estudios epidemiológicos en humanos, que tienen una actividad carcinógena. Por último, la formación de compuestos N-nitrosos se asocia con malformaciones congénitas. La Organización Mundial de la Salud, con el objetivo de prevenir el efecto tóxico a corto plazo de los nitratos estableció como nivel máximo permitido en agua potable un valor de 50 mg/litro.
Por todo ello, ARCO IRIS insta al ayuntamiento de Boimorto a extremar los controles químicos del agua potable que consumen sus ciudadanos, para evitarles problemas de salud. Asimismo,sería deseable que los servicios de salud y la inspección de Augas de Galicia realizaran análisis de forma más cotidiana y rigurosa. ARCO IRIS advierte que estará atento a los valores físico-químicos de los municipios de la montaña coruñesa, en caso de que los proyectos para instalar macrogranjas de animales, como la de Teixeiro, sean aprobados.