Y llegó el momento en que recibiremos al pequeño miembro de la familia y cabe preguntarnos ¿Cómo preparar una habitación para un bebé? ¿Qué condiciones mínimas de confort y seguridad debe tener? ¿Qué tendencias están a la orden del día? Y más interrogantes podrán develar en este post.

El aspecto decorativo, es otro de los factores a tomar en cuenta, por ejemplo, a fin de evitar todo lo inherente a factores de propensión alérgica, las alfombras vinílicas originales, suelen ser una alternativa segura, práctica y decorativa.

Sean bienvenidos a conocer algunas ideas prácticas y a su alcance.

Habitación para un bebé antes, durante y después

Ser previsivos será la clave del éxito, una habitación para un bebé deberá tener una preparación como mínimo seis meses de anticipación a su llegada, para re adecuar, acondicionar y ajustar cada uno de los rincones de su espacio.

El trato con pinturas, partículas de polvos y demás agentes externos contaminantes, pueden bien ser tratados mucho antes de su llegada, de manera que, no exista ningún agente patógeno alérgico que pueda afectar al bebé cuando llegue a casa.

Por otra parte, durante su permanencia en casa hemos de tomar en cuenta la dinámica particular de cada niño y sus padres, es decir, la distancia de habitaciones, los mobiliarios verdaderamente funcionales, la ocupación del espacio, redistribución del espacio y otros factores que sólo se analizan durante la estadía y convivencia.

Finalmente, la habitación siempre será para el bebé, en cualquier etapa de su desarrollo humano, su espacio; el cual podremos ir re adecuando con las diversas alternativas emergentes, por ejemplo, los vinilos infantiles fáciles de colocar resultan una opción práctica y de fácil adaptación.

3 Ideas a considerar para preparar la habitación a su bebé

• La cuna

En el mercado, encontrará diversas marcas con ajustes ergonómicos y de calidad (ángulos de inclinaciones, materiales y más).

Los materiales de la cuna, deberá cuidar que sean a base de pinturas no tóxicas. La distancia entre varilla o barrotes deberá ser de 6 cm, esto evitará asomar la cabeza del bebé.

La altura promedio deberá ser entre 0,60 cm a 1 metro, para evitar inclinaciones del cuerpo del bebé. Debe contar con protectores que amortigüen sus desplazamientos (acolchados).

El colchón al igual que la cuna, deberá ser de marca reconocida preferiblemente.

• Cambiador

Esta herramienta útil y versátil, brindará la oportunidad de realizar los cambios del bebé en la seguridad y respaldo higiénico (sobre todo si se trata de padres primerizos).

Además de la lactancia que ha de procurar la madre, y sus permanentes dolores de espalda ¿Qué mejor manera de aligerar que por medio de un cambiador? Sí, la posición de encorvado para este acto, ya no será necesaria.

Por otra parte, el aspecto de seguridad es tan importante, ya que podrá disponer a la mano TODOS los recursos necesarios para cada cambio y lo mejor… a la altura de sus manos.

Muchas opciones de cambiador, incluyen la doble función de bañeras; de optar por ellas, estaría garantizando la comodidad a su medida y seguridad para su bebé.

• Sillón de lactancia

Este mobiliario es tan cómodo, que bastará con echar un vistazo en las revistas y ver cómo las madres lo han de considerar como un objeto de valor para su hogar.

La habitación de un bebé representa su TODO en cuanto a espacio se refiere, aquí suele llevarse a cabo cada una de sus rutinas.

Por ello, la alimentación como aspecto importante, habrá de procurarse en las mejores condiciones de higiene, confort para madre y bebé y ambiente cálido sin variaciones de climas.

La lactancia, más que aportar los nutrientes necesarios para el sano desarrollo del bebé, es un acto de amor y de contención emocional, por ello, una silla de lactancia, tendrá el ángulo ideal para el descanso de la espalda de madre y el cobijo y regado cómodo de sus brazos para contener a su bebé.

Contemplarlo, ver sus sonrisa, sus gestos, formas de mirar y la complicidad de miradas ¡No hay nada más enternecedor que este momento!